El artista colombiano Camilo Echeverry es el nuevo protagonista de la entrega más reciente de los oki Arts. El testimonio alegre y muy contundente de cómo Camilo dejó la carne, se suma a la de otros cientos de artistas que entienden que la fama puede, y debe, ser útil para educar. Estos materiales causan cada vez más atracción entre los educadores al entender cómo este tipo de herramientas son la mejor arma para expandir una verdadera educación en los colegios y universidades.
Sobresale en este esfuerzo que los testimonios recogidos por los Okiarts tienen la valentía de representar un verdadero ideal de cambio y revolución, más allá de los vaivenes, las peleas estériles y las disculpas políticas, se entiende que lo que cada individuo requiere, si desea cambios en grande es empezar con sus propias costumbres.
Es por eso que cuando Camilo habla, y no sólo lo hace en los okis arts, e insiste en la importanciá de la protección animal… sus seguidores se cuestionan y el hecho de seguirlo, y lo entretenido que pueda ser, se vuelve por fin en una entretensión que, y este ideal debería revisarse más seguido, si trae algo bueno para todos los demás.